Ahora traes la lluvia y, aunque ya no tenga edad, me desvisto en la tormenta, grito tu nombre en la calle.
Haces que este otoño ilumine mis mañanas y haga callar al reloj del vientre del cocodrilo.Traes un corazón para cada hombre de hojalata.
Haces que este otoño ilumine mis mañanas y haga callar al reloj del vientre del cocodrilo.Traes un corazón para cada hombre de hojalata.
Que todo temporal nos regala una enseñanza.
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